• Los reumatismos de tejidos blandos afectan a estructuras y tejidos extraarticulares, cursan con dolor y en ocasiones, edema o inflamación de las estructuras periarticulares que, en numerosas ocasiones, son confundidos por el enfermo, refiriendo su padecimiento como un dolor articular.
• Estos reumatismos afectan áreas periarticulares de los hombros, tórax, codos, muñecas, dedos, cadera, espalda, etc. En estas situaciones se ven afectados con mayor frecuencia los tendones, las vainas tendinosas, ligamentos, bursas, músculos, fascias y otras estructuras periarticulares.
• Cualquier persona, sea cual sea su edad o condición, está expuesta a padecer alguno de estos reumatismos que pueden aparecer al realizar alguna actividad deportiva, laboral o en el hogar, cuando se realizan movimientos o se mantienen posturas inadecuadas de manera repetitiva.
• Hablamos de “reumatismos extraarticulares” refiriéndonos a un grupo de entidades que se caracterizan por el dolor regional, cuyas causas principales son traumáticas o por la sobreutilización de los tendones, entesis y bursas.
• El dolor es el síntoma más característico, este es mucho más perceptible con ciertas maniobras de compresión, tracción o movimientos asistidos, por lo que es una enfermedad demostrable.
• Se deben al sobreuso de estas estructuras, producto de un riesgo laboral o por lesiones de manera aguda, como en los deportistas. En la mayoría de los casos son enfermedades relativamente benignas pero que pueden implicar incapacidades a largo plazo.

En resumen, si se queja de algún dolor regional en las extremidades, no dude en solicitar una consulta con el reumatólogo porque estas afecciones no son graves, pero ocasionan incapacidades que, aunque no sean a largo plazo por ser tratadas a tiempo, sí pueden ser recidivantes y hacerse crónicas.